El salvador del capote de la noche.
Tras una cena ligera con un compañero nos fuimos los dos de pesca, a las diez de la tarde-noche en plana bajamar estábamos en Baldaio lanzando como locos todo cuanto teníamos en las riñoneras, queríamos aprovechar a lo máximo el cambio de luz y la marea baja con poco de oleaje que nos venia de perlas, a las once y media entraron cinco pequeñas que volvieron al agua, tras esas capturas&sueltas en cada lance enganchábamos una laminaria de un banco de laminarias rotas que la corriente metio en el pozo en el que estábamos, a las doce decidimos ir para dentro de la laguna sin éxito ninguno con las compuertas cerradas teníamos un monto de agua y la cosimos con los vinilos casi todos lados, a las dos y media cansados de andar y lanzar sin haber clavado una pieza buena (al menos mas de medio metro) decidimos provar pescas mas descansadas y cómodas y aprovechando que la llena era a las cuatro y veinte con una altura de cuatro metros, pusimos rumbo a Caion provar suerte en el puerto con los vinilos a los abadejos o lo que quisiera picar, por lo menos sentados en el borde de los muelles ibamos descansar un poco, nada mas llegar tuvimos unas cuantas picadas sin llegar a clavar nada y le echamos las culpa al tamaño de los vinilos, seguimos lanzan por el puerto y al final ya casi marchando clave un abadejo de 52 cms, tras esa buenas pieza nos animamos y seguimos pero sin resultado alguno, una hora mas tarde de clavar la pieza decidimos marchar, algo menos cansados que cuando llegamos a Caion y con una buena pieza.