jueves, 19 de julio de 2012
Otro golpe al furtivismo.
Dos furtivos en el Mandeo.
En la madrugada del 18 de julio, un Agente Forestal (de los funcionarios que están viendo recortados sus derechos laborales), en colaboración con la Sociedad de Pescadores Río Mandeo y el Vigilante Jurado de Pesca Fluvial de la sociedad, realizaron un servicio de vigilancia en el Coto de Betanzos del Mandeo. El resultado del servicio fue la denuncia de dos furtivos que se encontraban pescando a las 00:00 h de la noche, fuera del horario legal.
Los dos infractores en el momento de ser interceptados estaban pescando con caña, empleaban como cebo el risco y estaban en posesión de la documentación según lo legalmente establecido. No llevaban ninguna captura.
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Patético, lo de estos guardas. Usan esta página y otras que he visto por ahí para alardear de... ¿qué? ¿De que han cogido a dos qué? ¿Furtivos? ¿Dos tíos que con toda la documentación en regla y sin capturas se pasan unos minutos de la hora? ¿Eso es su concepto de furtivos? Un acto de servicio a la naturaleza donde los haya. Heroidicidad en estado puro. Gracias por vuetra impagable labor, guardas. Sois lo plus de lo plus. Lagrimones como puños, que me caen. Tengo el vello de todo mi cuerpo erizado como escarpias. Gracias a vuestro abnegado buen hacer, el Mandeo está a salvo y su fauna piscícola ya puede abrir al máximo sus branquias, respirar hondo y profundo y remontar sin traba alguna su cauce río arriba para cumplir con la llamada de la naturaleza... Me da la risa tonta... Y eso suponiendo que así sea, porque no me creo nada. ¿Llevaban el risco montado? ¡Guauuuuu!!! ¡Criminales!!! ¡A Teixeiro de cabeza con ellos!!! No sé porqué no los ejecutaron allí mismo, así, sin más; sin mediar palabra. Triste, muy triste si este es el concepto que tienen los que supuestamente tienen que vigilar el río a la hora de definir a un furtivo, cuando todos sabemos que hay cierto personaje de Pontedeume que se anda paseando a sus anchas por éste y otros ríos arponeando salmones y reos a diestro y siniestro, o también de la existencia de redes en la ría que impiden el paso de salmones y reos (por cierto, no veo ningún artículo que haga referencia al hecho de que la inmensa mayoría de los reos capturados en los últimos años lleven impresa la marca de las citadas redes en su cuerpo). Pena y tristeza, son las palabras que definen lo de estos “funcionarios que reciben ostias por todos lados”. Por mi os podeis ir del río, porque para la función que ejercéis en él es lo mismo que no teneros. Lo que pasa es les es mucho más sencillo ir a por dos pobres desgraciados que no le están haciendo daño a nadie y anunciar la hazaña a bombo y platillo en los blogs del ramo y en el periódico a los dos días (con foto de los héroes a lo vigilantes de la playa incluida), que echarle cojones al asunto e ir a por quienes realmente tienen que ir. Por cierto. Este año unos compañeros y yo nos quedamos más de tres y más de seis veces más allá de la hora pescando también con risco y hablando con los guardas de turno al mismo tiempo... Me parece extraño que no nos multaran... Uy... Ahora que pienso... Me callo porque eso me convierte en furtivo y no vaya a ser que me caiga encima el brazo tonto de la ley. Acabo con la misma palabra con la que empecé... PATÉTICO
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